PRIMAVERA 0, ÓLEO SOBRE TELA, 120 x 90 cms
Durante estos 20 años de creación, como le pasa a la mayoría de los pintores, uno va incursionando y experimentando en diversos géneros interpretativos y representativos que puedan identificar la postura de su mensaje al plantarse frente a un cuadro.
La creación de una obra siempre lo he dicho y lo voy a seguir sosteniendo, es un proceso casi doloroso en el que chocan sentimientos y frustraciones propias de un génesis.
Se produce una implosión de ideas que al momento de aflorarlas se oprimen entre ellas para dejar salir a la más conflictiva, aquella que tiene la misión de enlazar una cadena para que se logre el efecto de maravillar al pintor por su creación, o sencillamente para hacerla desaparecer lentamente del plano pictórico.
Hay elementos que uno debe refugiarse para combatir esta artillería de conceptos fútiles que esta sociedad nos vomita, la naturaleza. Esta permite descubrirla permanentemente con sus formas y colores, someternos a su poesía plástica, y maravillarnos de su belleza escénica.
EL SALTO, OLEO SOBRE TELA, 100 x 120 cms.
ROJO, OLEO SOBRE MADERA, 120 x 70 cms
JARDIN, OLEO SOBRE TELA, 120 x 100 cms